En la Amazonía, los días se inician con la honra a los ancestros.
Esa fue la primera lección que aprendió Liliana Madrigal, cofundadora del Amazon Conservation Team (ACT), al trabajar de la mano de los pueblos indígenas.
Así fue como ella fue entendiendo que la conservación no puede desligarse de la cultura y que, para empezar a trabajar en la constitución de áreas protegidas, primero hay que ocuparse de la gente.
¿Cómo involucrar a los pueblos autóctonos en la conservación?
ACT fue creada como una alternativa a las prácticas de conservación que se venían dando. Vimos la posibilidad de trabajar, involucrar y fortalecer a los indígenas.
”Ante todo, seguimos los consejos de Richard Evans Schultes, el padre de la etnobotánica. Él decía que antes de proteger los bosques, lo que se necesita es conservar ese conocimiento de los indígenas y eso se logra trabajando con los mayores y fortaleciendo los sistemas de gobernanza tradicional”.
Con los problemas ambientales que afrontamos, uno observa la relación que mantienen los pueblos indígenas con la naturaleza y pareciera ser esa la solución...
No solo eso. Creo que el problema ha sido la gran arrogancia al pensar que la ciencia y la modernidad tenían todas las respuestas. Estos han sido pueblos ignorados.
”Aun así, dichosamente, todavía hay comunidades que mantienen su conocimiento”.
¿Cómo conciliar el tema de la propiedad privada y la propiedad comunal en función de la constitución de un área protegida?
Esa es una de las partes apasionantes del trabajo de ACT.
”Cuando empezamos a trabajar en el Amazonas, hace 16 años, lo primero fue agarrar los mapas. Nos dimos cuenta de que el 25% de los bosques estaba en manos indígenas.
”Entonces, empezamos a trabajar con las asociaciones en decantar todo el conocimiento ancestral y trasladarlo al mapa para ver dónde estaba aquello que para ellos era importante. Es decir, se trata de hacer todo un ordenamiento territorial a partir de su visión para así reclamar sus derechos.
”Mucho del trabajo de ACT se basa en todo lo que se tiene que hacer antes de que una comunidad indígena esté dispuesta a meterse en temas de créditos de carbono y otros temas similares.
”Lo primero es poner la casa en orden y después se ve qué se hace con la casa”.
¿Podría replicarse esa experiencia en Costa Rica?
Claro, pero los sistemas de gobernanza tradicional tienen que estar muy fuertes para que funcione.