Por si todavía alguien tiene duda de las nefastas prácticas pseudoperiodísticas impuestas por el programa Intrusos de la Farándula, una entrevista realizada por el periodista Daniel Ulibarri al “intruso” Diego Piñar nos termina de aclarar el panorama.
Consultado sobre las críticas que ha recibido dicho espacio, Piñar, a quien reconocemos su sinceridad, explicó cómo Intrusos ha introducido en nuestro entorno televisivo un estilo de periodismo “más agresivo” y “más de enfrentarse con la gente.”
“Traemos las bases de la universidad (') pero a nosotros nos enseñaron aquí, por ejemplo, cómo hacer preguntas incómodas, cómo abordar a alguien, cómo hacer que alguien se salga de las casillas'cómo hacer para que la gente conteste lo que uno quiere”.
La cita anterior no puede tomarse a la ligera. Escuchar a un joven periodista afirmar cómo lo aprendido en la universidad queda atrás para adaptarse al estilo de un programa que tiene por norma manipular al entrevistado es, cuando menos, repudiable.
Ulibarri, al escuchar semejante respuesta cuestionó: “¿Y se trata de eso de que la gente conteste lo que uno quiere?” A lo que Piñar, sin sonrojo contestó: “Se trata de generar la noticia, de provocar la noticia”.
¡Ahhhh! haberlo sabido. Ya no hacen falta las noticias de verdad. Ahora, según el nuevo “código de ética” diseñado por ‘Intrusos de la Farándula’, las noticias se generan y se provocan. (La entrevista completa se encuentra en YouTube: Daniel Ulibarri vs. Diego Piñar. Advertimos que no es apta para estómagos delicados).
Usualmente, lo que pasa en ese programa no es parte del espectro de crítica de esta columna... como casi todo el mundo, desde hace mucho optamos por la salida más fácil, el perillazo o el bloqueo de ese canal a esa hora. El problema es que, tras las increíbles declaraciones de Piñar, volvemos a caer en lo que nos interesa: si la instrucción es “picar” y provocar las respuestas que ellos quieren, más temprano que tarde alguna de las víctimas del burdo ardid se saldrá de sus cabales y, a como están los ánimos de caldeados contra este grupúsculo, puede pasar lo impensable. Ojo que lo venimos advirtiendo y el desparpajo de las declaraciones de Piñar no hacen más que darnos la razón.
Ahora entendemos mejor que Jalé, cuando acosó a Jaír, solo cumplía con su trabajo. Es decir, ella, como los demás jóvenes periodistas del programa, hacen lo que les enseñaron a hacer: incomodar, enojar al entrevistado y lograr que conteste lo que ellos quieren. Todo con el fin de fabricar “noticias” que sostengan una hora diaria de naderías por televisión. ¡Qué triste y qué bajo hemos caído!
La cigüeña se congració por partida doble con dos figuras conocidas en el medio nacional: Lizeth Castro, de Telenoticias, reveló el sorpresón de que en marzo, cuando cumple 40 años, se convertirá en mamá por segunda vez. Y la coreógrafa, cantautora y jueza de Bailando por un sueño 3, Flor Urbina, también soltó su buena nueva esta semana: se convertirá en mamá primeriza. Amén de los parabienes, ahora muchos se preguntan cómo le afectarán los cambios hormonales a Florcita en su labor de “jueza de hierro”. ¿Será más benevolente? ¿O acaso se pondrá más enojona? ¿De pronto, llorosilla de emoción? Lo que sí es un hecho es que, de fijo, a partir de ahora va a ser la gran consentida de Bailando.
Picadísimos nos dejó este martes la presencia (más bien, omnipresencia, porque estaba detrás de la silla del participante y lo enfocaron en todo momento) del empresario artístico Marvin Córdoba en ¿Quién quiere ser millonario? Córdoba se veía tan entusiasmado como chiquillo en palco de circo. Por un momento pensamos que estaba en fila para la ‘silla caliente’, pero no. Al parecer, la contentera tiene que ver con un proyectazo sorpresa que soltará de un momento a otro...
Puros pesos pesados. Así se le puede llamar al grupo que vimos cenando amenamente el viernes antepasado en el restaurante El rincón de Buenos Aires (por Plaza Víquez): se trataba nada menos que del expresidente Óscar Arias, su novia Suzanne Fischel, el exfuncionario y productor Ignacio Sánchez Cantillano y su pareja, la exministra Karla González. La cita, al parecer fue de patada larga, pues los cuatro andaban en el mismo carro: fue vacilón ver al señorial don Óscar subido en el BMW súper M3 que conducía Sánchez Cantillano.
Caras vemos, corazones no sabemos. La semana pasada, el actor y ahora presentador de televisión Geovanny Linaris le contó vida y milagros a Viviam Quesada en el espacio La verdad. Sin poses de ningún tipo, el actor evocó la forma en que se ha ido abriendo camino –a menudo cuesta arriba– y francamente nos cautivó su plática, que se nos hizo cortísima de sentida que estuvo. Hizo un clic espontáneo con la gente que participó por teléfono: ya entendemos por qué se ha convertido en el alma de A toda máquina.
“Un terraplén de tierra cayó sobre una vivienda”, se le zafó a la periodista –últimamente sucesera– Natalia García, de Telenoticias. ¡Plop!
Y la locutora de Noticias Monumental, a quien no logramos identificar en ese momento, anunció que una señora agricultora de Cartago “había tenido TRES TRILLIZOS” ¡Plop 2!
Allan Alemán, en una entrevista, el pasado 24 de agosto, dijo que “una cosa es lo que dicen los periodistas y otra los que saben de futbol...” Moraleja: Ningún periodista debería entrevistar al señor Alemán, o a cualquiera que sí sepa de futbol, porque según su decir, en definitiva hablan un idioma completamente diferente.
En un lucido evento varios costarricenses celebraron, el domingo pasado, el que sería el cumpleaños número 52 del desaparecido ídolo del pop, Michael Jackson. La iniciativa fue de Warehouse Dance Center, escuelas de la reconocida Maripili Araya e Hiram Castillo. El show,, como no podía ser de otra forma se lo robó Esteban Ramírez, el pequeño imitador de Jackson que ha cosechado admiración dentro y fuera de nuestras fronteras. El chiquillo es hijo del conocido e intrépido humorista Roque Ramírez, quien entre otros personajes da vida al pachuco payasillo Tucuico Tonight.