San José (Redacción). Hoy por la madrugada, cerca 900 ticos se deleitaron con el estreno de la película Batman: El caballero de la noche asciende, de Christopher Nolan.
Los cines de Cinemark, Cinépolis y algunos de CCM, abrieron su puertas para acoger a los más fiebres de la saga, que según sus impresiones al final de la película salieron más que satisfechos por lo visto en la pantalla.
"La película cumplió mis expectativas. Es un gran final para una saga. La película dura bastante pero ni se siente, es una gran película, la recomiendo", dijo Carlos Morales, estudiante de ingeniería que asistió a ver la cinta a Terramall.
Una buena cantidad de mujeres también se hizo presente a la cita con el hombre murciélago y no dudaron en darle un voto de apoyo al esperado final de la saga.
"Me encantan los personajes, como los conformó el director. Soy fan de Batman, y no puedo creer como hizo Nolan para plasmar tan bien al Batman de los cómics. Está excelente", expresó por su parte María Angélica Hernández, quien acudió a las funciones con una camisa alusiva al superhéroe.
De unas diez personas entrevistadas al final de la proyección, nadie se atrevió a señalarle ni un solo defecto a la nueva película. Todos coincidieron en señalar que Nolan presentó el mejor cierre posible de una batisaga que ya se considera como la mejor de la historia.
A pesar de la expectativa generada por el estreno de medianoche de la película y las preventas por Internet, las salas no registraron llenos totales en todos los cines. Por ejemplo, en Cinemark del Este se vendieron aproximadamente 300 boletos, repartidos en dos salas que tenían entre ambas unas 680 butacas disponibles.
Por su parte, en Cinépolis Terramall, la sala VIP estuvo a su máxima capacidad, pero la única sala disponible para el público en general no se llenó por completo, aunque tuvo una asistencia considerable.
En todos los cines se aplicó un protocolo de seguridad debido al atentado ocurrido el viernes pasado en Colorado, Estados Unidos, precisamente efectuado en una función de medianoche. Cada asistente era requisado a la entrada del cine y era sometido al detector de metales.