00/junio/2012. 9:30 am. San Jos. Siembra de rboles en el Parque de la Paz y el Parque los Conejos. Nuevo Corredor Biolgico. Un gran nmero de voluntarios asistieron al Parque de la Paz tanto para sembrar rboles como para hacer el encalado de aquellos rboles ms grandes, para protegerlos de plagas e insectos. Daniela Linares para LN. (Daniela Linares)
Unos 550 árboles, plantados ayer por 300 voluntarios, ayudarán a recuperar las microcuencas de los ríos Torres, Tiribí y María Aguilar.
La jornada de siembra tuvo lugar en los parques de la Paz, en San Sebastián, y Los Conejos, en Rohrmoser, Pavas. La actividad la organizaron el Ministerio de Ambiente y la Municipalidad de San José, que contaron con el apoyo de voluntarios de empresas privadas.
Con estos árboles se pretende constituir corredores biólogicos alrededor de las tres microcuencas que alimentan al río Virilla que, a su vez, es afluente del río Grande de Tárcoles, uno de los más contaminados de Centroamérica.
Se plantaron aguacatillos, almendros de río, ronrones, jorcos, jacarandas y guachipelines, entre otras especies.
“Casi todos son de floración y atraen aves”, dijo Jenaro Campos de la Municipalidad de San José.
La mayoría son especies propias del bosque húmedo premontano.
“En el cantón Central de San José ya no hay de esos árboles. Se fueron perdiendo por la deforestación, dada la expansión agrícola y urbanística”, explicó Dania Valle, funcionaria del municipio, quien agregó: “Decidimos reproducirlos en la zona protectora de El Rodeo para reintroducirlos y así rehabilitar los ecosistemas a lo largo de estas microcuencas”.
“Los árboles cumplen tres funciones en la recuperación de las cuencas: estos parques son sitio de alimentación y descanso de aves, también sirven para esparcimiento y belleza escénica, y ayudan a que el agua se filtre mejor para que los acuíferos no se agoten tan rápido y ayudan a fijar carbono”, detalló el ministro René Castro.
Según Castro, esta reforestación forma parte de un plan que el Minae está diseñando junto a los municipios. “Se trata de políticas azules, recuperación y reencuentro del ciudadano con sus ríos, sus humedales y sus mares”, dijo.
Manos a la obra. En el parque de la Paz, una centena de empleados del Banco Nacional, Pozuelo, Purdy Motor y Coca Cola-FEMSA y sus familiares se encargaron de plantar árboles, encalar y recoger basura.
“Me gusta la biodiversidad y esta es una forma de aportar”, dijo Masiel Hernández, empleada del Banco Nacional.
Acompañando a su esposo, que trabaja en Pozuelo, Diana Vargas dijo: “No quisimos quedarnos bajo las cobijas teniendo la oportunidad de hacer algo por la naturaleza”.
Al mismo tiempo, 200 voluntarios del Banco Popular, BAC San José, Café Britt, Agencia Datsun y aliados al Grupo Quadra hacían lo suyo en el parque Los Conejos.
“El llamado es que volvamos los ojos a la ciudad”, reflexionó Jorge Brenes, del Banco Popular.
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