Cráteres que alguna vez estuvieron rebosantes de sedimentos y agua hoy están secos, pero encierran las huellas que dejó este vital líquido en Marte.
Nuevas imágenes captadas por la sonda Mars Express de la Agencia Espacial Europea (ESA) aportan más pruebas sobre la existencia de agua en el llamado “planeta rojo”.
En las fotografías se distingue un cráter de 34 kilómetros de diámetro con un interior que los científicos de la ESA calificaron de “caótico”, pues muestra rastros de dos tipos de estructuras rocosas: mesas –bloques de piedra llanos y extensos– y yardangs –cuerpos rocosos que adoptan formas específicas debido a la erosión causada por el viento–.
Según explicó la ESA en un comunicado, tanto las mesas como los yardangs fueron moldeados a partir de sedimentos acumulados en el cráter luego de una inundación que cubrió toda esa área.
A lo largo del tiempo, los sedimentos más frágiles fueron erosionados y los más sólidos permanecieron ahí distribuidos al azar.
Las imágenes también muestran los vestigios de un pequeño y sinuoso río que bordea el cráter. De él quedan poco rastros; sin embargo, se puede observar un meandro –curva que describe el curso de un río– el cual fluye hacia el cráter.
El “fantasma” de otro cráter más pequeño también se divisa en las fotografías
Los científicos también pudieron identificar deslizamientos de tierra que podrían haber sido provocados por la presencia de agua que debilitó las paredes del cráter. Las imágenes de Mars Express fueron tomadas en una región aun sin nombre localizada algunos grados al sur del ecuador de este planeta en una antigua zona montañosa de Marte.
De acuerdo con los científicos de ESA, no solo el agua habría intervenido en la geografía montañosa de esa región sino también las erupciones volcánicas, como demuestran las cenizas que cubren la parte izquierda del cráter.
La misión Mars Express fue lanzada en junio del 2003 para estudiar la atmósfera, el clima, la composición mineral y la geología de Marte en busca de agua.