Washington AFP Los viajes largos al espacio, como los previstos para Marte, podrían exponer a los astronautas a niveles de radiación dañina para el cerebro y acelerar así el mal de Alzheimer.
Así lo dio a conocer un estudio publicado en la revista Plos One , el cual sometió a ratones a variadas dosis de radiación comparables a las que los astronautas experimentarían en Marte. La investigación demostró que los ratones expuestos a radiación fueron mucho más propensos a no recordar objetos o lugares, lo cual sugiere un deterioro neurológico precoz.
“La exposición a estos niveles de radiación podría causar problemas cognitivos y acelerar cambios en el cerebro asociados con alzhéimer”, dijo Michael O’Banion, de la Universidad de Rochester.
Los ratones también mostraron signos de alteraciones vasculares y una mayor acumulación de beta amiloide, la proteína “placa” que se acumula en el cerebro que es característica de la enfermedad.
“Este es otro de los factores que la NASA, que está claramente preocupada por los riesgos para la salud de los astronautas, tendrá que tener en cuenta al planear futuras misiones”, dijo O'Banion.
La NASA planea misiones tripuladas a un asteroide lejano en el 2021 y a Marte en el 2035. Un viaje de ida y vuelta al planeta rojo podría llevar hasta tres años.
En los últimos 25 años, la NASA ha financiado investigaciones para determinar los riesgos potenciales de los viajes espaciales para la salud humana, con el objetivo de desarrollar contramedidas y determinar si estos riesgos pueden poner en peligro las misiones tripuladas prolongadas al espacio profundo.
Estudios anteriores han demostrado el potencial de desarrollar cáncer, enfermedades cardiovasculares y trastornos musculoesqueléticos por el impacto de la radiación cósmica galáctica.