Centenial, Colorado. AP. Con el pelo teñido de naranja y aspecto cansado, el hombre acusado de perpetrar una matanza contra los espectadores del estreno de medianoche de una película de Batman compareció ayer ante el juez por primera vez desde su detección.
El sospechoso lo hizo luego que las autoridades revelaron que se niega a cooperar y que podrían pasar meses para saber las causas de ese espantoso ataque.
James Holmes, de 24 años, esposado y sin afeitar, permaneció sentado con un uniforme marrón mientras el juez le informaba del caso. Holmes se sentó inmóvil, con aspecto cansado.
En determinado momento cerró los ojos mientras hablaba el juez. La Fiscalía dijo posteriormente que desconocía si Holmes tomó medicamentos. Según las autoridades, se encuentra detenido y aislado por razones de seguridad.
Holmes no habló durante la audiencia. Sus abogados, defensores públicos, respondieron las preguntas del juez de si entendía sus derechos. Una mujer se puso a llorar durante la comparecencia.
La Policía dijo que Holmes, protegido con chaleco antibalas, disparó un fusil, una escopeta y varias pistolas en la proyección del estreno The Dark Knight Rises , y mató a 12 personas e hirió a 58.
Holmes llegó procedente de la cárcel del condado de Arapahoe, donde estaba confinado en una celda solitaria. Entró acompañado por sus abogados y otras personas.
Se sentó en el foso del jurado, junto a uno de sus abogados. Algunas personas lo miraron fijamente durante toda la audiencia, entre ellos Tom Teves, padre de Alex Teves, muerto en la matanza. Dos mujeres se estrechaban las manos, mientras una de ellas no cesaba de menear la cabeza.