El Salvador está listo para tirarse a pista

El Salvador ya está preparado para albergar este domingo el comienzo del tan esperado Reto centroamericano de baile, en el cual concursantes de ese país, Costa Rica y Honduras deberán entregar su mejor esfuerzo en la pista.

El lugar donde las seis parejas (dos por país) se disputarán la primera de las seis entregas de baile es un escenario relativamente nuevo, que el canal Telecorporación Salvadoreña (TCS) estrenó con sus producciones Cantando por un sueño y Bailando por un sueño.

Según dijo Oviedo, productor artístico de Bailando por un sueño El Salvador, el escenario donde las parejas se disputarán el primer lugar del concurso fue modificado para albergar el reto y lograr un espacio lo suficientemente amplio.

“Para nosotros es un tremendo compromiso ser la sede del comienzo del reto. Nos estamos preparando muy bien. La música con la que bailarán las parejas es de orquesta 100% salvadoreña, y estará bajo la dirección del músico Kiko Arteaga”, manifestó Oviedo.

El productor artístico comentó que buena parte del programa del domingo estará destinado a presentar a los concursantes de cada país, a los jurados y a los tres conductores del programa.

En cuanto a los presentadores, la salvadoreña Luciana Sandoval, el hondureño Salvador Nasralla y el tico Édgar Silva compartirán el escenario.

Las parejas de Costa Rica y Honduras comenzarán a reconocer el escenario salvadoreño el sábado, día en que ensayarán todos juntos.

Implacable juez. Soren Barahona, juez por El Salvador, comentó que las parejas de ese país, conformadas por Kahory Trujillo y Mauricio Franco y Jeovanny Medrano y Silvia Rodas, manejan un nivel alto de baile, que les permitirá medirse con sus contrincantes centroamericanos.

“Los cuatro concursantes están bien parejos en todos los géneros. Sus fuertes son los géneros tropicales, como buenos latinos que son. Lo que más se les dificulta es el vals, que requiere un poco más de postura, más técnica”, comentó el juez.

Barahona dijo que, en su caso, se inclina por evaluar con mayor rigurosidad que las parejas se ajusten a los tiempo y a los ritmos, así como la capacidad de actuación y caracterización en una coreografía.

“Particularmente, no me impresiona una cargada ni le doy más puntos a una pareja solo porque la haga. Las parejas no necesitan hacer trucos; es mejor hacer algo bien hecho y una buena cargada requiere tiempo y entrenamiento”, comentó Barahona, quien en tres ediciones de Bailando por un sueño El Salvador ha dado una calificación de 10 solo una vez.

“A las parejas les recomiendo que se preparen bien mentalmente, porque los géneros que se van a escoger no son nada fáciles”, añadió.

Barahona le dio un consejo más a los bailarines: tener seguridad. A su criterio, esa es una cualidad indispensable para quienes se suban a una pista de baile.

El jurado expresó que no ha visto videos para conocer el desempeño de las parejas ticas y hondureñas, pues prefiere no estar influenciado al calificarlas. Además, aseguró que, pese a ser salvadoreño, no se dejará llevar por favoritismos.

Soren Barahona comenzó su carrera en El Salvador, a los 14 años. Posteriormente, amplió sus conocimiento en Estados Unidos. Su fuerte son los bailes de salón, como él mismo lo asegura. Desde hace tres años es una de las fichas de Telecorporación Salvadoreña.