Los tiempos de “vacas flacas” de la economía internacional exigen redoblar los esfuerzos internos para acelerar el crecimiento económico y elevar el bienestar material de la población en general. Avanzar con mayor velocidad en la ejecución de las agendas de trabajo para profundizar la integración económica y financiera mesoamericana, debería ser una de las prioridades de la política económica de las autoridades costarricenses y del resto de los países de esta región.
Para tener una idea del potencial que ofrece una mayor integración regional, basta mencionar tan solo el crecimiento vertiginoso que experimentaron las exportaciones intracentroamericanas en las casi dos décadas anteriores a la crisis de 2008-2009, a pesar de las múltiples barreras, principalmente no arancelarias que frenan la expansión del comercio entre los países de esta región.
La agenda pendiente que permitiría avanzar mucho más en la integración económica y financiera mesoamericana, es amplia y está muy claramente definida. Conlleva acciones en varios campos, incluyendo medidas para reforzar la institucionalidad jurídica, el Estado de derecho, la seguridad ciudadana y material, la modernización de la infraestructura, y el desarrollo del recurso humano. Una de las iniciativas más interesantes que se ha planteado buscaría abordar no solo las serias limitaciones de infraestructura que aquejan a varios de los países, sino, también, la alta vulnerabilidad de toda la región a los desastres naturales.
Esa iniciativa consiste en crear un sistema de transporte marítimo de corto alcance (cabotaje), que no solo haría posible reducir tiempo perdido en trámites fronterizos, sino que además abarataría los costos del transporte (hay estimaciones de que, en la región, los costos de transporte terrestre pueden superar en 50% a los del transporte marítimo). De esta y otras iniciativas, capaces por sí solas de generar impactos importantes en el desarrollo económico y social de la región, sería bueno escuchar más de parte de las autoridades y del sector privado de los países mesoamericanos, idealmente en un futuro muy cercano.