La polémica comisión especial de Derechos Humanos fue nombrada con tres diputados del Partido Liberación Nacional (PLN): Óscar Alfaro, Jorge Rojas y Jorge Angulo; dos del Partido Acción Ciudadana (PAC), Carmen Muñoz y Juan Carlos Mendoza, el libertario Adonay Enríquez y el socialcristiano José Roberto Rodríguez.
El legislador Justo Orozco, de Renovación Costarricense, quien presidía ese foro hasta el 30 de abril pasado, quedó fuera de la nueva integración, además del diputado Carlos Avendaño, de Restauración Nacional, quien también había manifestado interés de integrar e incluso presidir el foro.
Orozco manifestó en numerosas ocasiones su oposición a la aprobación de proyectos en la agenda de la comisión de Derechos Humanos, entre ellos el de las uniones civiles entre personas del mismo sexo.
La presión para que Orozco quedara fuera de la plana legislativa vino constantemente desde fuera, sobre todo de organizaciones civiles que defienden los derechos de la población sexualmente diversa, pero también de algunos diputados de la oposición.
El más reciente capítulo del enfrentamiento en torno a las uniones homosexuales se dio entre Orozco y la diputada Carmen Muñoz, pues el evangélico pidió que Muñoz se recuse de discutir, tramitar y votar el proyecto de Ley de Sociedades de Convivencia en la Comisión de Asuntos Jurídicos.