San José (Redacción). Sueros producidos con la propia sangre del paciente ayudan a tratar una enfermedad llamada ojo seco severo, en la que la glándula lacrimal no funciona y no produce lágrimas.
Este es parte de los tratamientos que desde este año produce la Clínica Oftlamológica de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
"Las no son solo es agua, también tiene Ph y propiedades antiinflamatorias, por ese motivo la gente siente inflamación, cansancio y dolor, pero estas gotas tienen esas propiedades y les recupera", dijo Roberto Velázquez, director del Banco de Ojos de la Clínica Oftalmológica.
Amalia Alfaro, una de las pacientes, se siente mejor.
"Veo mejor, mi humedad en los ojos ya es normal. La mejor parte es que el suero se hace en poco tiempo", manifestó.
Esta no es la única técnica. La membrana amniótica, el tejido que acompaña a un feto durante el embarazo también ayuda. Este tejido se utiliza para tratar enfermedades que inflaman el ojo y afectan la vista.
"Es como una 'curita biológica'. Ayuda a reducir inflamación y dolor", dijo Velázquez.
La clínica también tiene nuevas técnicas en trasplante de córnea.