La agrupación nació el 17 de setiembre del 2011 en Nueva York. OWS había sorprendido al mundo con una protesta sin líderes contra la corrupción y la avaricia de Wall Street, que se fue ramificando a otras ciudades de Estados Unidos y Europa de manera inesperada.
El movimiento alcanzó su clímax en los primeros dos meses, pero luego sus campamentos instalados en el centro de grandes ciudades fueron desalojados poco a poco por la Policía, en algunos casos de manera violenta, como ocurrió con el parque Zuccotti, cerca de Wall Street, en el sur de Manhattan, a mediados de noviembre.
Desde entonces, sin visibilidad y dividido en torno a los pasos a seguir, OWS, que dice representar al 99% de la población, fue perdiendo fuerza, una dinámica que espera cambiar el lunes con su acción de “desobediencia civil no violenta” en torno a la Bolsa de Nueva York.
“Este aniversario nos da la oportunidad de volver a colocar nuestras preocupaciones en lo más alto de la agenda”, dijo Chris James, uno de los organizadores y estudiante de 26 años.