Con una temperatura ascendente conforme avanza la mañana, la mandataria llegó a la Dirección Regional de la Fuerza Pública, donde dio por inaugurado un equipo que incluye cámaras, pantallas, y demás accesorios para reforzar la seguridad de las vías puntarenenses.
Al terminar el acto, varios pequeños, con edades entre 6 y 11 años y vestidos de policías, le dedicaron un caluroso saludo a la gobernante.
Chinchilla se dirigió luego a la Plaza de Artesanías, en el Paseo de los Turistas, donde se ubica la sede del Instituto Costarricense de Puertos (INCOP), para la firma de un convenio entre esa institución y el Ministerio de Seguridad. Ahí hizo entrega de más equipo para la vigilancia porteña. Se trata de seis bicicletas, un pick-up, tres vehículos para movilizar detenidos, además de 80 cascos, 80 máscaras, 40 escudos, 40 espinilleras, 60 chalecos antibalas, 29 pistolas de 9 mm. y 12 armas de apoyo.
El ambiente en Puntarenas se mantiene tranquilo, agitado solo por el paso de la comitiva presidencial y la incertidumbre acerca de si el Gobierno dará luz verde a los carnavales de esta ciudad que empezarían hoy, pero que están en suspenso debido a cuestionamientos por parte del Ministerio de Salud.