Obama anunció en febrero la eliminación del programa “Constellation”, lanzado en 2004 por su predecesor George W. Bush, con el cual los estadounidenses preveían volver a la Luna antes de partir a la conquista de Marte.
Unas semanas después, anunció que intentaría un plan para poner en órbita a los astronautas en Marte hacia 2035 y desarrollar lanzadores comerciales para transportarlos a la Estación Espacial Internacional (ISS).
Armstrong estimó que Obama tomó la decisión de abandonar el programa “Constellation” basándose en el asesoramiento de un pequeño grupo mantenido en secreto, durante una audición el miércoles ante el Comité de Comercio Ciencia y Transporte del Senado.
"Tantos expertos en la comunidad espacial" no sabían que “Constellation” sería dejado de lado, la decisión "fue probablemente tramada por un pequeño grupo en secreto que persuadió al presidente que tendría la oportunidad única de dejar su huella en un nuevo programa innovador", declaró.
"Según varios rumores, ni el director de la Nasa (Charles Bolden), ni el principal asesor científico del presidente (John Oldren) estaban enterados", continuó Armstrong.
Interrogados más temprano en el marco de esta audición, estos últimos habían defendido fuertemente la nueva propuesta de Obama.