Ministro alerta a diputados por grave faltante de policías

El ministro de Seguridad, José María Tijerino, dijo ante los diputados que el país enfrenta un grave faltante de policías para cuidar a la población en las calles.

En este momento, la proporción nacional no da siquiera para un agente por cada mil personas.

“Tenemos capacidad apenas de poner en la calle simultáneamente menos de 4.000 policías”, lamentó Tijerino en una alocución en la cual dibujó un paisaje gris sobre la capacidad para responder a la delincuencia.

El país tiene más de 13.000 policías , pero menos de 12.000 se dedican de verdad a funciones policiales, de los cuales unos 1.000 están incapacitados y nunca, por tanto, hay más de 3.900 funcionarios protegiendo a la gente en cada uno de los turnos de ocho horas.

Al ser más de cuatro millones los pobladores del país, la proporción queda en más de mil personas por cada agente policial. Para peores, es muy probable que ese funcionario esté mal capacitado, que su delegación esté en ruinas y que carezca de un buen carro para perseguir a los delincuentes.

Quien dio ese diagnóstico fue el propio Ministro, el martes, en la comisión legislativa de Seguridad Ciudadana, a menos de dos meses de haber asumido funciones formales con el nuevo gobierno.

“No sé si estamos perdiendo la batalla”, dijo Tijerino tras reconocer que la situación está muy lejos de servir para promesas optimistas, porque “el problema es muy grave”, en especial por la pobreza como caldo de cultivo para las redes del narcotráfico.

“Estamos contendiendo con un enemigo formidable y en condiciones absolutamente desiguales. Si no fuera por el coraje de nuestras fuerzas policiales, que en su inmensa mayoría compensan su falta de capacitación, equipo y salario adecuado, no sé adónde iríamos a parar en poco tiempo”, agregó Tijerino.

Debilidad. El problema no es únicamente la falta de policías. El Ministro mencionó la falta de preparación de muchos de ellos, que se han convertido en agentes tras tomar un curso de solo seis meses y habiendo disparado en promedio no más de 75 veces en su vida.

En países como España, el curso tarda dos años. Se supone que un buen tirador debe jalar el gatillo al menos 50 veces por semana.

Encima, la infraestructura policial es ruinosa, indicó Tijerino. Solo el 12% está en buen estado. Lo comprobó desde el domingo 9 de mayo, cuando comenzó sus recorridos por las delegaciones. Más del 60% necesita reparaciones urgentes. Y eso es lo que se sabe, “porque la información es difusa, caótica”.

Y falta más, pues los vehículos de la Policía están “bastante deteriorados”, en parte por los trámites burocráticos para sus reparaciones. Es normal, por ejemplo, que una motocicleta pase varada semanas mientras se compra un repuesto que vale ¢10.000.

A ello se agrega la preocupación por la falta de disciplina en la Policía, en parte porque muchos superiores se abstienen de aplicarla para no meterse en entuertos legales.

“Y olvidaba algo: un arsenal nacional albergado en una situación altamente peligrosa (...) que podría causar una tragedia”, añadió Tijerino en alusión a cómo se guarda gran cantidad de armas y municiones.

El Ministro aseguró que hacen todo lo que pueden.