Organizar la ceremonia del sábado en la cual Laura Chinchilla asumió la presidencia costó ¢100 millones más de lo previsto.
Jorge Wálter Bolaños, tesorero de la comisión de traspaso, estimó ayer que la erogación final fue de ¢400 millones.
“Están son cifras preliminares porque podría haber algún gasto imprevisto, pero lo grande ya está cubierto”, declaró.
Pese a la diferencia económica, el tesorero de la comisión estimó que los gastos están cubiertos porque captaron más donaciones y patrocinadores.
El aporte del Estado para el evento ascendió a ¢200 millones.
Sobre las razones del aumento en el costo, Bolaños dijo que obedeció a diferentes factores.
Por ejemplo, inicialmente la comisión planeaba dar alimentación para 4.000 personas, pero al final tuvo que hacerlo para 7.000.
“Muchos eran estudiantes o visitantes de otros cantones”, resaltó Bolaños.
“Las camisetas eran para 5.000 personas y le dimos a 9.000, y tuvimos que comprar 4.000 paraguas más”, puntualizó el también exministro de Hacienda.
Lista grande. Otra razón del incremento en los egresos de la actividad fue contar con un mayor número de invitados.
“Para las invitaciones se hace la lista y luego uno se da cuenta que faltan personas; además, algunos invitados pidieron llevar a alguien más”, comentó Bolaños.
El tesorero aseguró que hoy revisará todos los rubros para tener una cifra exacta.
“Creo que en la mañana de este martes ya la puedo tener”, recalcó Jorge Wálter Bolaños.