La Haya (DPA). Las elecciones en Holanda concluyen con un empate en sondeo a píe de urna. Los socialdemócratas del Pvda y los liberales de derechas del VVD, cada uno con 31 escaños respectivamente, serían las fracciones ganadoras y empatadas en las elecciones legislativas holandesas celebradas hoy.
La tercera fuerza es el partido de ultraderecha antimusulmana del líder xenófobo Geert Wilders, que ganaría unos 22 escaños, 14 más de los que tiene ahora. Este resultado supondría un auge fulgurante de la ultraderecha xenófoba en Holanda, considerada hasta hace poco la cuna de la tolerancia y la convivencia multicultural.
El primer ministro saliente Jan Peter Balkenende presentó su renuncia como jefe partidario tras los primeros resultados electorales. Según las proyecciones, su partido CDA retrocedió de 41 a 21 escaños, y quedaría como apenas cuarta fuerza política siendo uno de los peores resultados obtenidos por la fracción.
Balkenende apuntó que se quedará en el cargo hasta que se forme un nuevo gobierno. "Los resultados de estas elecciones son muy, muy decepcionantes, son una bofetada", reconoció el ahora ex primer ministro.
Balkenende ha estado ocho años al frente del último gobierno de coalición holandés. Una unión que se rompió en febrero pasado tras una agria disputa interna por la negativa del Pvda a que Holanda prolongara su misión en Afganistán, en el marco de la OTAN.
La ultraderecha sería la gran beneficiada del hundimiento del democristiano. "Es una victoria enorme, es fantástico", fueron las primeras palabras de Wilders, al conocer el resultado de la encuesta a pie de urna al cierre de los locales electorales.
La comunidad musulmana de Holanda mostró su preocupación ante el ascenso electoral del partido de Wilders que se ha mostrado abiertamente en varias ocasiones abiertamente su discurso contrario a la presencia de inmigrantes musulmanes en el país. "Quien quiera hacerlo, es libre de votar al PVV, pero nuestra preocupación es que ese partido sólo fomente el enfrentamiento y el odio", alegó el portavoz de la Plataforma de Organizaciones de Musulmanes de Holanda, Driss El Boujoufi.
Hasta conocer el resultado oficial, por el momento correspondería al joven líder del VVD, Mark Rutte (1967), convertirse en el nuevo primer ministro de Holanda, y al líder socialdemócrata Job Cohen, ex alcalde de Amsterdam, ser su aliado en la formación de un gobierno de coalición.
Wilders aspira a ser la llave del futuro gobierno de coalición, aunque debería buscarse otros aliados distintos del Pvda y del VVD, que no tienen intención alguna de pactar con la ultraderecha xenófoba.
La fórmula que se baraja esta noche entre bastidores de La Haya sería la formación de un gobierno de coalición "violeta", mixto, entre el VVD, que gana nueve escaños, el Pvda, que pierde dos, los verdes de Groenlinks, que también avanzan en estos comicios, de siete a 11 escaños, y el liberal de izquierdas D66, que pasa de tres a diez. Es el mejor resultado para los ecologistas de Groenlinks desde 1998, otro récord en estos comicios.
La participación rondó el 74 por ciento de los 12 millones de holandeses convocados a las urnas.
Este sondeo a píe de urna, fue realizado por el instituto de opinión Synovate para la televisión NOS, la agencia de prensa holandesa ANP y el canal privado RTL.