Washington AFP Una investigación realizada en Estados Unidos y publicada en la revista Journal of the American Medical Association (JAMA) vincula, por primera vez, la sustancia química bisfenol A (BPA) con la obesidad infantil.
La mayor parte de la población estadounidense presenta rastros de ese plástico en la orina, pero este estudio muestra que los niños que registran los niveles más elevados tienen dos veces más riesgo de ser obesos o de adquirir sobrepreso que aquellos que muestran concentraciones más bajas.
El bisfenol A es una sustancia presente en recipientes plásticos destinados a almacenar alimentos y biberones, entre otros objetos.
“Esta es la primera vez que se vincula una sustancia química presente en nuestro entorno con la obesidad de los niños en una importante y representativa muestra nacional”, explicó Leonardo Trasande, profesor adjunto de Pediatría de la Universidad de Nueva York y principal autor del estudio, que se realizó a 2.800 jóvenes con edades de entre 6 y 19 años.
La investigación se llevó a cabo entre 2003 a 2008 y comparó fundamentalmente la tasa de BPA presente en la orina en relación con el peso de los participantes, que, según sus resultados, fueron divididos en cuatro grupos.
Alrededor de un 22% de los niños que mostraban la tasa más elevada de BPA en la orina eran obesos, frente al 10% de los que mostraban los índices menores.
“Estos resultados confirman necesidad de ampliar nuestro enfoque en la lucha contra la epidemia de la obesidad”, en aumento constante desde hace 10 años en los Estados Unidos, explicó Trasande.
El investigador apunta también a estudios sobre animales realizados en laboratorios que mostraron vínculos entre el BPA, sospechoso de ser un alterador hormonal, y la obesidad. El científico señaló también que los efectos nefastos del BPA son desde ahora reconocidos por las autoridades.