¿Le gustaría disfrutar de una serie de televisión con estilo cinematográfico, de acción militar trepidante e infestada de teorías conspirativas? Si es así, por nada del mundo se pierda Last Resort ( Último recurso ), el drama militar estadounidense que la cadena AXN estrena este próximo 7 de noviembre a las 9 p.m. La serie, creada por Shawn Ryan y Karl Gajdusek debutó hace un mes en los EE.UU. con excelentes críticas y una gran aceptación.
La trama gira en torno a la tripulación del ficticio USS Colorado, un submarino de guerra de la Marina de los Estados Unidos bajo las órdenes del capitán Marcus Chaplin (Andre Braugher).
Traición en marcha Tras el rescate de unos marines en aguas del Mar Arábigo y en medio de una grave crisis política en Washington, Chaplin recibe una sorprendente orden superior: lanzar de inmediato cuatro misiles contra Pakistán. Un ataque de estas proporciones cobraría la vida de millones de personas.
El buen juicio del capitán lo hace dudar de la autenticidad de la orden recibida, máxime que esta llegó a través de una red secundaria, mucho menos segura. Este tipo de red fue diseñada para ser utilizada únicamente en caso de que Washington DC hubiera sufrido un ataque destructor.
Tras comprobar que en la capital todo marcha con normalidad, el mandamás del submarino solicita una verificación de la orden de ataque por el medio correcto. Pero el capitán Chaplin es relevado del cargo y el teniente comandante Sam Kendal (Scott Speedman) es asignado en su lugar. Sin embargo, Kendal igualmente cuestiona las órdenes emanadas y solicita confirmación.
En respuesta a la desobediencia del USS Illinois se lanza sobre él un furibundo ataque. Al percatarse de que han sido declarados enemigos de su propio país, los marines hallan refugio en la también ficticia isla de Santa Marina, en el Océano Índico, desde donde toman control de una estación de comunicaciones y ataque preventivo de la OTAN.
Luego declaran una zona de exclusión de 322 kilómetros alrededor de la isla y atrincherados allí buscarán la manera de descubrir quién les tendió la trampa y demostrar su inocencia.
“No reconoceremos ni obedeceremos un gobierno que intente matar a los suyos. Si el actual presidente de los Estados Unidos o de cualquier otra nación viola este perímetro, tenemos 17 misiles nucleares a bordo y no dudaremos en desatar el infierno en su contra”, es el enérgico mensaje que el restituido capitán Chaplin lanza a sus contrapartes y con eso, el escenario queda servido para lo que está por venir.
Reacción entusiasta “Rebosante de acción y tensión, un impacto directo en nuestro sistema nervioso”. Así describe Matt Roush, de TV Guide la emoción desbordante del primer episodio.
“Ryan es uno de los productores más versátiles y talentosos en la televisión”, añade Glenn Garvin del Miami Herald, quien ve en Last Resort una renovada versión de los thrillers políticos conspirativos de la era de Vietnam.
Otro punto a favor es el amplio reparto, “uno de los más grandes ensambles actorales que se hayan visto en horario estelar”, apunta David Hiltbrand del Philadelphia Inquirer.
Hiltbrand calificó de “sensacional” el episodio piloto, alabando su gran suspenso y calidad cinematográfica.
“¿Qué pasó con el país en el que crecí?”, se pregunta en los segundos finales del capítulo piloto el capitán Chaplin.
La línea más parece parte del discurso político actual que de un libreto de ficción. Ojalá y el USS Illinois logre mantenerse a flote.