Como queriendo mostrar que una semana de descanso sí relaja las relaciones políticas, los diputados regresan hoy a sus tareas legislativas con promesas de cordialidad.
Una agenda consensuada, con proyectos de uno y otro partido, recibe hoy a los congresistas, para las dos últimas semanas del período de sesiones ordinarias.
A partir del 1.° de agosto, el Poder Ejecutivo será el que defina la agenda legislativa por un mes.
La jefa de los diputados oficialistas, Viviana Martín, y su homólogo del Partido Acción Ciudadana (PAC), Juan Carlos Mendoza, coincidieron ayer en señalar que este es un buen momento político.
“Hemos logrado un buen entendimiento entre los ocho jefes de fracción. Espero que continúe así”, dijo ayer Martín, confiada también en la sintonía interna de los 24 diputados liberacionistas.
Mendoza obvió las diferencias de las últimas semanas, en especial por el permiso para el ingreso de buques y personal militar de Estados Unidos a territorio nacional.
“Ha habido buena actitud para avanzar en estas semanas. Podemos creer que ese diálogo constructivo continuará en extraordinarias”, aseveró el diputado del PAC.
Se intentó ayer conocer las expectativas de Danilo Cubero, jefe de fracción libertario, y de Wálter Céspedes, su homólogo del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), pero no contestaron sus celulares.
A parte de varios proyectos pendientes de trámites, los diputados abordarán en lo que queda de julio las reformas a la Ley de Tránsito en una comisión especial.
Así se pasarán dos semanas hasta que llegue la primera agenda elaborada completa por el Ejecutivo, en la que destaca un proyecto que sí pondrá a prueba las intenciones de cordialidad legislativa: la Ley general de electricidad.
“De alguna manera estos días que vienen son preparativos para las extraordinarias. Tenemos que afinar nuestra estrategia, que fue bastante exitosas en los primeros dos meses y medio de trabajo”, manifestó Viviana Martín.
Resaltó los once proyectos aprobados hasta ahora por el actual Congreso, entre los que destacan dos reformas constitucionales y tres créditos internacionales.