La solicitud de trasladar el relicario nace de un amigo cercano del beato Juan Pablo II: el arzobispo Piero Marini, enviado por el papa Francisco al congreso en Costa Rica.
Marini ocupó el cargo de Maestro de Celebraciones Litúrgicas en el Vaticano, por ello, acompañó al “Papa viajero” por todo el mundo, siempre, pendiente de los detalles de sus misas y demás celebraciones.
De hecho, Marini es el presidente del Pontificio Comité para los Congresos Eucarísticos en el mundo católico.
Este martes, llegó al país para brindar conferencias en el congreso que comenzó el domingo anterior con una misa.
En su visita, el Arzobispo pidió a los sacerdotes y laicos rezar por la paz.
El simposio congrega en Cartago a sacerdotes, religiosas y laicos de todo el país quienes profundizan temas de teología y catequesis.
La actividad concluirá este domingo, a las 10 a. m., con una misa presidida por Marini en el Estadio Fello Meza, donde se espera lea el mensaje enviado por el papa Francisco a los costarricenses.
A esta celebración asistirá la presidenta, Laura Chinchilla, según confirmó Casa Presidencial.
El IV Congreso Nacional Eucarístico nace en el marco del “Año de la Fe” declarado por el papa emérito Benedicto XVI, como ocasión del 50 aniversario de la apertura del Concilio Vaticano II y los 20 años de la publicación del actual catecismo de la Iglesia Católica.
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