Nueva York AP Citigroup, que todavía es parcialmente propiedad del Gobierno después de beneficiarse con un rescate durante la crisis financiera, está otorgando aumentos a sus principales ejecutivos que podrían ascender a millones de dólares.
El director general, Vikram Pandit, decidió en febrero del 2009 no recibir bonos o compensaciones y reducir su salario a $1 al año hasta que la compañía recuperase los beneficios, pero el presidente del banco insinuó que planea otorgarle un jugoso incremento el próximo año.
Citi sigue más débil que la mayoría de los grandes bancos, pese a que han transcurrido dos años de la caída financiera.
Al pagar los aumentos en acciones de la compañía y no dinero en efectivo, Citi ha decidido cumplir con las normas de limitar los salarios a no más de $500.000 anuales para los 25 ejecutivos máximos en las instituciones financieras que todavía reciben ayuda federal.
“¿Están evadiendo las reglas para evitar perder gente talentosa?”, preguntó Charles Elson, director del Centro Weinberg en la Universidad de Delaware.
Citi se esfuerza por impedir que sus directivos se vayan a algunos de sus rivales en Wall Street, todos los cuales han devuelto ya el dinero del rescate federal y no están limitados por las mismas restricciones en la compensación a los ejecutivos.
Citi, el banco estadounidense más afectado durante la crisis crediticia del 2008, recibió $45.000 millones en dinero de rescate del Gobierno, parte del cual fue convertido en acciones el año pasado. El Gobierno está vendiendo gradualmente su capital accionario y todavía es propietario de un 17% del banco.