EscucharEstados Unidos (DPA). La automotriz estadounidense Chrysler se mostró hoy optimista debido a sus mejores resultados operativos en el primer trimestre del año, pese a las pérdidas de 3.800 millones de dólares (2.800 millones de euros) acumuladas entre junio y diciembre de 2009.
En el primer trimestre del año, Chrysler alcanzó ganancias operativas por 143 millones de dólares, aunque los resultados finales arrojaron pérdidas de 197 millones. Con un monto de 9.700 millones de dólares, la facturación trimestral fue ligeramente mejor a la registrada en el último periodo de 2009.
"Confiamos en que las ventas de Chrysler vuelvan a incrementarse cuando saquemos nuevos modelos al mercado en el segundo trimestre", señaló el presidente de la compañía, Sergio Marchionne, en la sede de Aburn Hills, en el estado norteamericano de Michigan.
Entre los nuevos vehículos están la nueva versión del clásico Chrysler 300, un nuevo jeep del tipo Grand Cherokee y el Fiat 300, un vehículo eléctrico pequeño de la compañía italiana del mismo nombre, con la que la estadounidense tiene una cooperación.
Las pérdidas de Chrysler en 2009 se concentraron sobre todo en el último trimestre, con un total de 3.800 millones de dólares. Los fondos de salud y el pago de jubilaciones lastraron especialmente los resultados.
La facturación entre junio y diciembre del año pasado alcanzó los 17.700 millones de dólares. Según la compañía, el proceso de bancarrota tuvo como consecuencia la pérdida de numerosos clientes, algo a lo que se sumó la crisis económica.
Chrysler, la menor de las tres grandes automotrices estadounidenses, no ha podido recuperarse al mismo ritmo que sus competidores, que registraron un fuerte aumento de sus ventas en los últimos meses.
Los modelos de Chrysler son considerados como anticuados, algo que ha tenido influencia en las continuas pérdidas de la empresa. Los nuevos automóviles equipados con tecnología de Fiat no saldrán al mercado antes de 2012.
Marchionne, que es a la vez presidente de la compañía italiana, asumió el mando de Chrysler tras la declaración de bancarrota. Fiat cuenta con un 20 por ciento de las participaciones en la estadounidense, mientras la mayoría está en manos del Estado norteamericano.
Las previsiones de la automotriz estadounidense son bastante optimistas. Para 2010 se cuenta con mejorar la facturación a un monto entre los 40.000 y 45.000 millones de dólares. Asimismo, tras la salida de una serie de nuevos modelos, se espera alcanzar ingresos de 68.000 millones de dólares, con ganancias operativas de unos 5.000 millones.
Chrysler cuenta también con las marcas Dodge y Jeep. De acuerdo a lo previsto en la cooperación con Fiat, en 2014 un 60 por ciento de los vehículos de la automotriz estadounidense estará funcionando con tecnología de la empresa italiana.
En contrapartida, Fiat espera ganar más fuerza en el mercado norteamericano, entre otros con la nueva versión eléctrica del Fiat 500.
