El clamor de Chinchilla cerró la noche de discursos de las autoridades del Gobierno, donde se repitieron las tres promesas que vienen escuchando los cartagos desde la administración Arias Sánchez: mejores vías, un hospital nuevo y la reactivación del tren a San José.
La noche, apenas nublada, abrazó con una temperatura agradable a los centenares de asistentes a la llegada de la antorcha con la que se celebra la noticia de independencia del país, 120 años después.
Por otra parte, la mandataria reiteró su compromiso con la política fiscal para sostener los servicios del Estado. “No podemos seguir contentándonos con soluciones a medias”, afirmó Chinchilla.
“Debemos enfrentar con realismo, con solidaridad y visión de futuro, este desafío. Demasiado se ha pasado la estafeta fiscal de una administración a otra”, dijo la presidenta ante una audiencia menos combativa que en otros años.
El diputado cartaginés por el Partido Liberación Nacional (PLN), Luis Gerardo Villanueva, expresó su satisfacción por la labor del Gobierno y afirmó que se avanza en el proyecto de reactivación del tren a San José.
La presidenta de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), Ileana Balmaceda, firmó un cartel simbólico de la licitación del terreno de diez hectáreas para la construcción de un nuevo hospital.
Sin embargo, para el panadero Marlon Rodríguez, de 47 años, la fe es que en el próximo Consejo de Gobierno se hable de obras y no de expectativas del Ejecutivo.
“Ahora que ya tienen el terreno, esperamos que se empiece a ver el resultado”, dijo Rodríguez.
La mayor preocupación del panadero es, según dijo, el problema de la calidad de los servicios médicos, algo que la presidenta también mencionó en su discurso a la hora de pedir más impuestos.
“El estrangulamiento de los servicios públicos solo podrá afectar a los ciudadanos”, dijo Chinchilla.
Agregó que para proteger los servicios, “no hay otra salida que aumentar los ingresos fiscales, procurando que contribuyan más los que más tienen”.
El alcalde cartaginés, Rolando Rodríguez, defendió la gestión del Ejecutivo. Aseguró que si el avance de las promesas va a paso lento es porque se trata de “grandes proyectos” y reiteró, luego de acabados los juegos de pólvora, que seguirán trabajando en la misma línea.
“Tenemos fe en la victoria de esta batalla cívica, es difícil pero lo lograremos”, finalizó Chinchilla.