El canciller de la República, Enrique Castillo, informó sobre un acuerdo del Gobierno, según el cual la presidenta, Laura Chinchilla, no asistirá a ninguna cumbre de presidentes convocada por el Sistema de Integración Centroamericana (SICA), mientras sea presidido por Nicaragua.
El anuncio se hizo tras la reunión de ayer en la mañana entre la presidenta y los embajadores ticos en los otros siete países miembros del SICA.
La cita se realizó luego de que la Corte Centroamericana de Justicia (CCJ) condenara al país por el supuesto daño ambiental causado con la construcción de la trocha fronteriza.
Dicha sentencia, que es “servil a los intereses de Nicaragua, de una corte que se ubica en Managua y con un presidente nicaraguense, ocurrió (el pasado lunes) en la fecha en que Nicaragua comienza la presidencia pro témpore del SICA”, expresó Castillo.
Además, Costa Rica desconoció nuevamente cualquier fallo de la CCJ por ser un órgano “politizado”, según declaraciones del canciller Castillo.
Estos acuerdos se dieron en medio de un clima de tensión entre las dos naciones por el conflicto limítrofe que está en estudio en la Corte Internacional de La Haya.
Costa Rica “permanecerá activa” dentro del SICA, “luchando precisamente por su institucionalidad para que logre sus objetivos”, pero, durante la presidencia pro témpore nicaraguense, Chinchilla “se abstendrá de participar en cumbres de presidentes” de ese organismo, añadió Castillo.
Al mismo tiempo, el Gobierno se prepara para enviar a Managua a Javier Sancho –nuevo embajador costarricense en Nicaragua–. El canciller anunció que el nombramiento de Sancho rige a partir del 15 de julio.
Tras la reunión, la presidenta Chinchilla se retiró de la Cancillería sin hablar con la prensa.
Desde octubre del 2010, las relaciones entre Costa Rica y Nicaragua vienen a menos. La razón es la disputa del territorio de la isla Portillos, denominado isla Calero , que invadió Nicaragua en el 2009. Sin embargo, el presidente de ese país, Daniel Ortega, niega esa versión.