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Esto es bueno, pero el uso hace incrementar la posibilidad de que la cámara sufra algún tipo de daño en cualquier momento.
Para garantizar una larga vida a su cámara digital, puede seguir los siguientes consejos sobre cómo cuidarlas.
Su cámara o las lentes de la cámara venían probablemente con una tapa, utilícela.
Si la tapa se puede desprender, trate de adquirir algunos de los productos más baratos para el cuidado de las lentes. Estos suelen consistir en una cinta con un extremo adhesivo que se ajusta a las lentes, y en la cinta elástica, la cual se ajusta cómodamente en torno a las lentes o al cuerpo de la cámara. Así, su función es mantener la tapa colgando de la cámara cuando no está cubriendo las lentes del aparato.
Para combatir el polvo o las manchas que inevitablemente afectan a las lentes de la cámara, independientemente de la tapa, se puede tomar varias precauciones. Un método es el uso de una brocha limpia y suave, tal como los pinceles de un artista, para quitar el polvo.
Para eliminar las manchas, use un paño de limpieza de lentes y una solución que hallará en cualquier tienda fotográfica. Hay también productos especiales de limpieza de lentes. Un producto muy popular es Lens Pen o “lápiz de lentes” (http://www.lenspen.com/), que combina un pincel y una almohadilla de limpieza en un delgado cilindro que cabe en el bolsillo como si fuera un lápiz.
Estas partículas de polvo se revelan en las imágenes digitales como puntos oscuros que afean la imagen y que hay que limpiar después mediante un software de edición de fotos.
Frente al problema del polvo, tiene usted dos soluciones: limpiar periódicamente el sensor o enviar la cámara a un centro de servicio del fabricante para que lo limpien profesionalmente. Esta última solución no anulará la garantía, pero tomará tiempo.
La primera solución implica que usted aprenda el delicado arte de limpieza del sensor usando productos tales como Visible Dust (http://www.visibledust.com/) o Sensor Swabs (http://www.photosol.com/).
El uso de cualquiera de estos productos para limpiar el sensor por su propia mano invalidará la garantía del fabricante, así que tiene que saber lo que está haciendo.
Como mínimo, si tiene una réflex, debería tener usted un soplador, que al apretarlo lance aire directamente sobre el sensor. Este accesorio lo encuentra en cualquier tienda fotográfica o en Internet.
Este soplador no limpiará el sensor totalmente, pero bastará para el comienzo.
Si tiene una cámara digital compacta o una de las nuevas réflex con limpieza automática del sensor, tiene usted suerte. No tendrá la preocupación del polvo ni de la limpieza del sensor, aunque hay informes de que algunas cámaras con limpieza automática del sensor siguen teniendo problemas con el polvo.
Sin embargo, si se trata de una costosa réflex que usted piensa revender algún día, una buena inversión sería el envío de la cámara al centro de servicio del fabricante, puesto que el próximo comprador seguramente estará dispuesto a pagar más si el aparato está en buenas condiciones.
Ubique en Internet los centros de información en todo el mundo de Nikon, Canon y otros de los principales fabricantes.
En caso de daño más grave que paralice la cámara, trámite obligado será visitar el centro autorizado de servicio del fabricante.
