El Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, que a la fecha sigue llamándose así, era el “rector histórico” de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), al punto que hasta que se aprobó la Ley de Presidencias Ejecutivas, fue el ministro de Trabajo quien presidió la junta directiva de la CCSS.
Pero la CCSS nunca tuvo a cargo la salud. Históricamente, como todo seguro social, tuvo a cargo la atención de trabajadores (y luego, se amplió la cobertura y en los setentas se declaró su universalidad) en sus programas de Enfermedad y Maternidad, e Invalidez, Vejez y Muerte (pensiones y subsidios).
Era el Ministerio de Salud (MS) el que promovía la salud y desarrollaba programas educativos desde las llamadas “luchas”: contra la anquilostomiasis, antivenérea, antituberculosa, etc., y también tenía programas rurales y escolares (médicos y dentales); incluso, todavía a inicios de los noventa, era factible para los profesionales en salud hacer el servicio social con el MS o con la CCSS.
Pero la CCSS tampoco era un seguro “completo”. El INS recauda aún las pólizas de riesgos de trabajo y accidentes, propias de un seguro social; la CCSS no recibe tal dinero y no pocas veces tiene que atender a personas que han sufrido secuelas en esas áreas sin lograr que el INS le traslade los montos del costo de su atención.
Con la aprobación de las leyes del TLC que liberalizaron los seguros, se perdió la oportunidad de haber trasladado los riesgos laborales del INS a la CCSS y hacer del INS una institución dedicada exclusivamente a seguros comerciales y no a seguros sociales.
El Ministerio de Planificación Nacional aprobó mediante nota DM-113-98, de 25 de febrero de 1998, la “Propuesta de Reestructuración del MS”, para convertirlo en el rector del Sector Salud, a cargo de las funciones de Conducción y Dirección (políticas de salud), Vigilancia de la Salud, Regulación de la Salud (acreditación y habilitación de establecimientos de salud y afines) e Investigación (científica, tecnológica, epidemiológica).
Ligado al proceso, los decretos incorporaron a la CCSS como parte del Sector Salud (por cierto, el INS no figura).
El proceso de reestructuración del MS, en el marco de la reforma del Estado, buscó consolidar un ente pequeño y fuerte, capaz de asumir las funciones señaladas; tenía como principios el acceso universal, la atención integral de la salud, la equidad en la prestación de servicios, la solidaridad en el financiamiento y una amplia participación de las fuerzas sociales.
Además, se argumentó que “si el MS ejecutaba programas no podía autoevaluarse”, por lo que se trasladó su personal “operativo” a la CCSS. Pero la CCSS los incorporó a sus clínicas en su práctica tradicional curativa, biologicista y médico-céntrica, y con el decaimiento de las unidades de penetración rural, las móviles y las clínicas escolares, se desplomó la salud pública preventiva y el impacto en morbi-mortalidad no se hizo esperar: obesidad, enfermedad cardiovascular, accidentes, violencia... que con programas educativos y de atención primaria habrían tenido otro desarrollo.
Como si fuera poco, la planificación en recursos humanos ha propiciado carencias importantes para hacer frente a la demanda en los niveles de atención curativa y rehabilitadora a nivel de técnicos y de especialistas principalmente y, obviamente, dejó por fuera la formación de técnicos para programas de prevención y de atención primaria.
Ahora que la junta directiva revisa la organización de la CCSS, vale la pena considerar la presentación de un proyecto de ley para que los riesgos laborales y accidentes sean asumidos por la CCSS (que cobre la póliza y de los servicios).
Asimismo, sobre la pertinencia de sus gerencias, debería considerarse la posibilidad de mantener la Gerencia Médica para los programas de “enfermedad y maternidad” y crear una Gerencia de Atención Primaria para los programas de prevención, promoción y atención primaria que son urgentes para que la CCSS trascienda la atención (a veces inoportuna e ineficaz) de la enfermedad y logre hacer efectivo el derecho de la población a la salud integral.