El objetivo se pretende alcanzar fortaleciendo el programa Mercado Alternativo para Acciones (Mapa) que ideó la BNV hace unos cuatro años; el cual ahora el BID visualiza como “proyecto piloto” con el fin de replicarlo en el resto de la región centroamericana..
Mediante el convenio se dotará a Mapa de unos $800.000, monto del cual el BID aportará unos $495.000 y el resto lo pondrá la BNV.
El monto servirá para invitar y ayudar a más empresas en el país a alcanzar los estándares adecuados (según las normativa de Gobierno Corporativo) para poder ser atractivas a inversionistas externos. La meta inicial es acercar a unas 100 empresas al programa y que al menos 10 de ellas terminen emitiendo valores en un mercado organizado.
Las empresas además de capacitación para mejorar sus procesos, tendrían la opción de recibir aportes económicos que les permitan asumir los gastos de los procesos de mejora.
Fernando Quevedo, representante del BID en el país, dijo que la necesidad de profundizar el mercado de capitales es sentida en toda la región, por lo que el organismo está dispuesto a iniciar esta experiencia en Costa Rica y replicarla en caso de comprobar su éxito.
Los nuevos recursos de Mapa también se ocuparán para crear una red de asesores de Pymes, expertos en Gobierno Corporativo, y patrocinadores que faciliten el proceso de las firmas a alcanzar mejores estándares.