El lugar de la boda Astor Courts, la propiedad del empresario hotelero y multimillonario John Jacob Astor, quien falleció con el hundimiento del Titanic, quedó blindado desde el cielo.
Al parecer la celebración, que tuvo lugar en la tarde, costó varios millones de dólares, aunque amigos de la familia Clinton aseguraron que costó menos de $1 millón, que fue la cifra difundida por la prensa estadounidense.
La gran protagonista: Chelsea Clinton, metodista, lució un trabajo de Vera Wang, que, según el catálogo de la diseñadora estrella neoyorquina, costó $25.000.
El vestido con escote de la novia tenía aplicaciones de pedrería en la cintura. Chelsea utilizó el pelo recogido y el largo velo dejaba ver los pendientes que, junto con la pulsera, eran las únicas joyas que portaba la novia, quien lució sencilla pero radiante.
El banquero Marc Mezvinsky, el ahora esposo, asistió vestido con traje negro y llevó el chal para la oración que emplean los judíos.
Su madre, la Secretaria de Estado de EE. UU. asistió con un diseño de Oscar de la Renta, que se destacó por su color rojo púrpura.
Tras la boda –que se efectuó por el rito judío y por el metodista–, los padres de la novia rompieron el secretismo y emitieron un comunicado en el afirmaban estar orgullosos y emocionados por el enlace.
“No podríamos haber deseado un día más perfecto para iniciar el inicio de nuestra vida en común. Y estamos muy felices de que Marc se una a nuestra familia”, detalló el comunicado de prensa.
Sin embargo, no todos fueron felices en Rhinebeck, pueblo donde se realizó el enlace entre Clinton y Mezvinsky.
Como detalló la agencia DPA, Emn Haddad-Friedman eligió el mismo pueblo para celebrar su boda. La profesora de Brooklyn escribe en su blog que aunque no lo hiciera adrede, Chelsea Clinton convirtió en un infierno lo que tenía que ser un día maravilloso.
Ella debió enfrentar los cierres de calles que alargaron su camino a la iglesia por más de una hora para asistir a su boda. Por supuesto, llegó tardísimo y estresada.
Sin embargo, aseguró optimista: “Mientras nosotros estuviéramos ahí, un testigo y alguien que nos pueda casar, había boda”.