San José (Redacción). Paciencia. Es el requisito que deberán tomar en cuenta los cientos de conductores que se enrumben hacia Cartago, esto debido a los arreglos que realiza el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) en las losas de concreto de la autopista Florencio del Castillo y satura el paso de vehículos en ese sector.
Christian Vargas, director de Conservación Vial del Conavi, dijo que la remodelación tiene un costo de ¢600 millones y se financia con recursos del fondo destinado a mantenimiento vial.
La reconstrucción de la losas de concreto dañadas a lo largo de 450 metros lineales, en sentido San José- Cartago, inició el pasado sábado 23 de febrero.
El Conavi prevé que las obras concluyan el próximo 22 de mayo.
Los trabajos se realizan en la sección que comprende desde la Bomba Cristo Rey hasta la Estación de Pesaje, en el sentido San José -Cartago, en un horario de 24 horas con fines de semana incluidos, indicó el funcionario.
Según Vargas, los cambios en la losa se debe a que la estructuras llegaron al final de su vida útil y presentan un avanzado deterioro. “Las losas tienen más de 30 años de haberse construido, por lo que era urgente sustituirlas para la seguridad de los usuarios”, dijo Vargas.
Trabajos. Las labores consistirán en la reconstrucción de las planchas dañadas con un sistema de losas cortas con concreto de alta resistencia, para la cual se colocarán capas de sub base y de material mejorado con cemento, a fin de proveer de una estructura uniforme.
Asimismo, se intervendrán los drenajes de la vía, altamente deteriorados, debido a que los suelos se encuentran altamente saturados con agua, principal causa de los daños a la superficie de ruedo en este sector.
Vargas explicó que inicialmente se habilitó un carril para los usuarios, pero que a partir de este lunes ya están abiertos dos carriles.
“Se estaba haciendo carril reversible, pero afectábamos el tránsito saliendo de Cartago, ahora se hizo un desvío a una ruta provisional a través de una calle marginal a la autopista y hoy quedó habilitado otro carril, es decir hay dos carriles.
”Lo que sucede es que la velocidad se va a ver reprimida porque son zonas de trabajo, entonces las personas que circulaban a 80 kilómetros por hora, ahora lo hacen a 40, lo cual evidencia un efecto de cola”, explicó Vargas.
De acuerdo con Vargas, las presas las sufren los usuarios durante la hora pico en la tarde, de 4 p. m. a 8 p. m.
Algunos usuarios afirman que la autopista se satura mucho. Por ejemplo, José González, vecino de Cartago, indicó que “le toma 30 minutos más llegar a su casa debido a las largas filas que se hacen en la autopista”.
Rutas alternas. Las autoridades recomiendan a los conductores utilizar como vías alternas como la ruta 218 que comunica Guadalupe con Llano Grande pasando por Rancho Redondo, mientras que para el tránsito liviano se recomienda la Calle de Coris que comunica Patarrá y conecta al Parque Industrial en Cartago.
En horas pico la presencia de oficiales de tránsito será efectiva para en caso de ser necesario habilitar un carril reversible.