“No creo que la carrera de un escritor se pueda medir por los premios que recibe. Se puede ser muy bueno y no ganar premios y se puede ser malo y ganarlos”, así de claro habló Antonio Muñoz Molina, luego de saberse ganador del Premio Príncipe de Asturias de Letras.
Las declaraciones de Muñoz las publica el diario El País de España y pertenecen a la conferencia de prensa que el escritor brindó hoy en la Casa América, en Madrid.
“Cuando uno escribe lo primero que quiere es terminar un libro, lo segundo es que se lo publiquen y lo tercero es que guste la historia. No se piensa en los premios”, agregó el autor de libros como El jinete polaco (1991), Plenilunio (1997) o Sefarad (2001).
Según el jurado, Muñoz conquistó el prestigioso galardón por plasmar con “hondura y brillantez fragmentos relevantes de la historia de su país, episodios cruciales del mundo contemporáneo y aspectos significativos de su experiencia personal”.
Muñoz, quien dijo al diario El Mundo asumir el premio con naturalidad, gratitud y sorpresa, añadió que el reconocimiento le llegó “ casi antes de haberlo deseado”.