Oviedo (DPA). Su compromiso con la tolerancia y la reconciliación de los pueblos, expresado en su obra novelística y ensayística, le valió hoy al escritor libanés Amin Maalouf el Premio Príncipe de Asturias de las Letras.
"Su obra traza una línea propia hacia la tolerancia y la reconciliación, un puente que ahonda en las raíces comunes de los pueblos y las culturas", destacó de él el jurado reunido en la ciudad española de Oviedo.
Maalouf, nacido en Beirut en 1949 y afincado en Francia, es uno de los escritores contemporáneos que más ha profundizado en la cultura mediterránea. Autor de obras como "Samarkanda" (1988) o "León el africano" (1986), su trabajo ha sido traducido a más de 20 idiomas.
"Desde la ficción histórica y la reflexión teórica, ha logrado abordar con lucidez la complejidad de la condición humana", añadió el jurado. "Con un lenguaje intenso y sugerente, Maalouf nos sitúa en el gran mosaico mediterráneo de lenguas, culturas y religiones para construir un espacio simbólico de encuentro y entendimiento".
En la votación final, el libanés se impuso a la escritora española Ana María Matute y al poeta chileno Nicanor Parra. El galardón está dotado con 50.000 euros (61.000 dólares) y una estatuilla diseñada por Joan Miró.
Periodista además de escritor, la guerra civil libanesa llevó a Maalouf a exiliarse en Francia en 1976. Como redactor jefe de "Jeune Afrique", cubrió acontecimientos como la guerra de Vietnam y la revolución iraní. Desde 1985 se dedica de forma exclusiva a la literatura.
Entre los galardones recibidos a lo largo de su carrera cuenta también con el prestigioso Premio Goncourt, que recibió en 1993 por "La roca de Tanios", y el Prix Mediterranée.
El de hoy es el quinto de los ocho premios que la Fundación Príncipe de Asturias falla este año.
Antes se fallaron el de las Artes, que obtuvo el escultor Richard Serra; el de las Ciencias Sociales, que fue para el equipo arqueológico que descubrió los guerreros de terracota de Xian; el de Comunicación y Humanidades, que reconoció a los sociólogos Alain Touraine y Zygmunt Bauman, y el de Investigación Científica y Técnica, obtenido por los bioquímicos David Julius, Linda Watkins, Baruch Minke por investigación de las claves cerebrales del dolor.
Los galardones serán entregados en el otoño español por el príncipe Felipe, en una ceremonia en el Teatro Campoamor de Oviedo.