El trasplante que les salvaría la vida nunca llegó. El año pasado, 22 personas perecieron en espera de un nuevo hígado.
Mientras, otros 12 pacientes sí tuvieron la oportunidad de recibir el órgano y sobrevivir.
En el 2010, se registraron nueve casos de enfermos hepáticos que estaban el la lista de espera y fallecieron.
En lo que va de este año, una joven murió tras aguardar por un hígado. Ella era Mariana Moncada, una bailarina de 22 años de edad, quien estuvo internada en el Hospital México. Aunque las redes sociales se inundaron con una campaña de apoyo a Mariana, la joven no resistió la espera.
Los datos sobre los fallecidos provienen de la Caja Costarricense del Seguro Social, pero fueron dados a conocer por la Dirección de Migración.
La entidad migratoria fomenta que los extranjeros que residen en Costa Rica sean donantes; pero, a la vez, promueve que la cultura de donar se expanda en todo el país.
Según la Caja, 666 pacientes conforman la lista de quienes necesitan un nuevo órgano.